Si, sé que no es común. Mis padres decidieron que lo mejor era que yo tomara la decisión de bautizarme en la religión que yo decidiera por lo que no me bauticé de bebé como se suele hacer.
De acuerdo con la tradición los no bautizados no somos todavía laicos. Mis padres jamás se descuidaron de mí y siempre me enseñaron las escrituras y el buen camino.
Como todo ser humano pequé, no sé si mucho o poco. Pero Dios sabe que no hay mucha maldad en mi corazón y si la hay, lo siento mucho.
Ahora lo decidí, me voy a bautizar. La iglesia católica de mi comunidad da clases para adultos que quieren bautizarse.
Muchos dicen. Para que ir a la iglesia ?. Para qué creer en Cristo ?. Para qué creer en Dios ?.
Yo les digo que si todos fuéramos creyentes de Dios, no necesitaríamos tener rejas en las casas, ni cerrar nuestros autos. Son tan sabias y simples las escrituras para que todos vivamos de manera mejor que a veces pienso que la gente es muy ciega para no ver la verdad.
Algunos sabios consejos para ser más feliz cada día:
- No guardes rencores a nadie (ni a tu papá borracho, ni al ladrón que te robó, a nadie).
- Da la otra mejilla, no te pelees ni con esa tipa o tipo que te trata mal.
- Ayuda al prójimo. Aun cuando tú tienes mil problemas, puedes ayudar en pequeñas cosas. Verás que aumentan las personas que te sonríen, aumentan los amigos y te sientes mejor.
- Trata de ver lo bueno de la vida siempre. He tenido situaciones durísimas en la vida. Mi primo de mi edad murió, gente que me calumnió, pero yo andaba sonriendo. Tratando de salir adelante para que los problemas de la vida no me destruyan. Me acuerdo que en esa época una amiga me dijo. Hay una luz que te alumbra. Tienes suerte en todo. No es así. Simplemente trato de encauzar mis energías positivamente.
El bautismo es en 2 días, sé que soy un pobre pecador, que realmente no hice nada aún por ayudar al prójimo, pero espero que por lo menos 1 persona que lea este blog sonría un poco más. Si logro eso. Habré cumplido mi cometido.
Y como dirían los hijos de Ned Flanders:
“Mi corazón reboza de alegría, reboza de alegría. Y si al diablo no le gusta, qué se clave en una estaca. En una estaca”.
